Walter, vive sólo, tiene una madre que se está mudando, una extravagante hermana que busca un papel en una obra de teatro y muy pocos amigos, pero está buscando una relación y le gusta una compañera de trabajo llamada Cheryl (Kristen Wiig) que labora en otra área de la revista y que recién tiene un mes en la empresa. Pero el no tiene ni las agallas, ni la oportunidad idónea para acercarse a ella.
Un día su aburrida y cuidadosa vida cambia cuando llega al trabajo y se encuentra con la sorpresa de que la revista ha sido comprada por otra compañía y que se imprimirá una última edición escrita de esta. Para esto, hay un nuevo gerente de transición quien de primera impresión se comporta como un cretino y, que decidirá quiénes serán víctimas de un inminente recorte de personal.
Ese mismo día Sean O'Connell (Sean Penn), el mas célebre fotógrafo de la revista, con quien Mitty ha colaborado desde que empezó en la revista hace 16 años, envía una serie de negativos fotográficos junto a un presente para Walter, con un mensaje para él y la revista; que usen el negativo 25 como portada de la última edición. Pero Walter revisa el contenido del envío, y no encuentra el negativo 25, con lo cuál empieza una exhaustiva búsqueda, primero de la foto y luego del fotógrafo para preguntarle personalmente dónde puede estar, pero este puede estar en cualquier parte del mundo.
Entonces Mitty, inspirado por la situación de la empresa entabla una amistad con su compañera de trabajo y le pide ayuda para encontrar ese negativo que falta tratando de unir las pistas que puedan encontrar en las otras fotografías que recibió. Así empieza una travesía por los lugares donde ha estado Sean O'Connell para encontrarlo y preguntarle dónde esta el negativo perdido. Parajes de Groenlandia, volcanes en Islandia y nevados del Himalaya en Afganistán son algunos escenarios que recorre en busca del misterioso fotógrafo. Las imágenes son dignas de la revista y hay tomas aéreas amplias y visualmente impresionantes.
En medio de esta trama, hay una serie de fantásticos sueños despertinos de Walter, que son la única manera de lidiar con sus dificultades, sus anhelos y sus confrontaciones con otras personas. El giro argumental se hace evidente cuando estos sueños empiezan a disminuir y a reemplazarlos por aventuras reales, que bordean la inverosimilitud y hasta hacen dudar al espectador si se trata de otro sueño o de su nueva realidad atrevida y emocionante.
La película es interesante, entretenida, y romántica, en una manera original y de carácter visual. El personaje de Stiller tiene ciertos rasgos reconocibles y muy de su estilo, una actuación sobria y bien equilibrada. Kristen Wiig esta genial, su personaje es igualmente equilibrado; Cheryl es una madre separada, carismática, graciosa y creíble. Y Sean Penn es impecable en su breve participación como el fotógrafo Sean O'Connell.
La película no es una simple comedia romántica de Hollywood, tampoco es una película de acción ni un film personal o dramático. Es una película con personalidad, no necesariamente comercial sino mas bien actual y atractiva, cargada de simbología, referencias contemporáneas de cultura popular que se confunden con Product Placement (Papa John's, KFC, la misma revista LIFE), y con un guión rico en locaciones, secuencias graciosas, elementos personales, fantásticos y románticos. Una cinta bien lograda, y pese a no ser perfecta, está muy bien dirigida y conseguida, con un argumento redondo. Vale la pena verla y disfrutarla, muy recomendable.
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